Los micromachismos son prácticas de violencia en la vida cotidiana. Son sutiles y muchas veces pasan desapercibidos. Un ejemplo es cuando en un restaurante la cuenta se las dan a los hombres. También ocurre en las prácticas sexuales, los hombres creen tener mayor experiencia. Se vive violencia en casa, denunciar es impensable porque los recursos propios son mínimos, además el aislamiento que sufrimos las mujeres tb es un tipo de violencia. Otro tipo de violencia es la psicológica, atacan nuestra autoestima. La educación que recibimos en casa generalmente fué con estereotipos que refuerzan diferencias arbitrarias entre géneros. Siempre es importante que podamos resistir a la violencia como un acto revolucionario, necesitamos crear espacios seguros para que las mujeres podamos seguir resistiendo y finalmente pero no menos importante, por todo esto vamos a tumbar el patriarcado. #MásTurbadasQueNunca